Mágico y puro como como el color que predomina en sus personajes blancos.
Un espectáculo adaptable para todo tipo de espacios y formatos, puede ser itinerante.
Con música, danza, magia, se crea una atmósfera de niebla ligera que nos hará sentir en las nubes.
Zancudos, bailarines, acróbatas, trapecistas, magos, acompañan a la carroza que conduce la mujer sobre la luna.