En las tierras lejanas del extremo norte vive un pueblo olvidado por dioses y hombres.
Un pueblo legendario, un pueblo de tormenta. Y cuando, en el solsticio, el sol está más alejado del ecuador, estas personas se embarcan en un largo viaje. En una procesión majestuosa, guiada por un pájaro con grandes alas blancas, Dos guerreros gigantes lideran la marcha de las musas y las altas sacerdotisas. En sus burbujas de cristal con árboles extraños, por sus canciones y sus danzas aéreas.
